En DQ Polvos somos una empresa comprometida con el medio ambiente y consciente de las necesidades de la industria en cuanto a pintura se refiere, por eso nos dedicamos a fabricar las mejores pinturas en polvo libres de tóxicos volátiles, que no sólo promueven un mejor medio ambiente, sino que también aseguran la salud de quienes las utilizan, pues al no emitir gases tóxicos provenientes de solventes, los consumidores evitan problemas tales como la fatiga, el dolor de cabeza, los problemas respiratorios, entre otros.
En nuestra fábrica de pinturas estamos convencidos de que la mejor opción se encuentra en las pinturas libres de solventes, es por eso que ponemos todo nuestro empeño en realizar los mejores productos con los que podrás obtener resultados más duraderos y de calidad que con las pinturas convencionales.
Podemos definir pintura convencional como en el conjunto de emulsiones que se encuentran suspendidas en un medio líquido, estos son pigmentos utilizados para el revestimiento de diversos materiales y superficies; hablando de la pintura en polvo conocida como power coating son los mismos pigmentos, pero libres de solventes, pues no se requiere un medio líquido para que estos se fijen en las superficies, estos funcionan al ser expulsados mediante una pistola, al activar la carga electrostática, los pigmentos se ionizan negativamente, esta es la razón por la que pueden adherirse a cualquier superficie dando una mayor durabilidad y un acabado perfecto.
La pintura ha tenido varios procesos evolutivos, se cree que hizo su primera aparición hace treinta mil años, los registros de los cuales se obtiene esta suposición son las pinturas rupestres hechas con pigmentos naturales extraídos de las plantas, insectos y sangre.
Pero no fue hasta la revolución industrial que la surgió pintura como la conocemos al día de hoy, y fue tomada en cuenta como parte importante de la economía mundial y elemento indispensable en la decoración y en la industria de la construcción. La primera fábrica de pintura de la que se sabe, nació en Boston en el año 1700, fue fundada por el empresario Thomas Child, pero en 1867, un siglo y medio más tarde, la D.R. Averill, obtuvo la patente de la primera pintura preparada, siendo éstas las precursoras de las que usamos en la actualidad.
A mediados de 1880, la fábrica de pinturas comenzó a crecer como un centro industrial importante, ubicándose en los estados con mayor población y adquiriendo fama de un producto necesario en la industria. Gracias a la automatización de las maquilas de pintura, la fabricación y distribución de ésta comenzó a hacerse presente en más estados y países, convirtiéndose en un jugoso negocio y llegando a manos de empresarios y de pequeños comerciantes.
Pese al éxito de la pintura preparada aún existía el problema del transporte, pues ésta pesaba demasiado y era complicado que llegara hasta lugares lejanos, por lo que la estructura descentralizada de fábrica de pintura fue la solución para que éstas llegaran a más lugares, este método fue el que dominó la industria de la producción y distribución de pintura hasta 1900.
A partir de este siglo, la pintura pasó por varios procesos de perfeccionamiento y profesionalización de la industria, creando mejores revestimientos y liberándose de materiales altamente tóxicos, así se crearon nuevos mercados para la pintura, dejando de ser sólo para revestir interiores y fachadas de edificios.
Fue Ford quien comenzó a usar una diversa gama de colores para su línea de autos T, se usaban estas pinturas para cubrir, proteger y embellecer cada unidad creada en su fábrica. La pintura a partir de 1900 revolucionó enormemente, una fábrica de pinturas creaba revestimientos para diferentes superficies y objetos, se crearon pigmentos comestibles y pinturas de todos tipos de mejor calidad y de un manejo menos complicado, llegando a ser un producto que todos podían comprar en las tiendas especializadas.
Pero aún no estaba del todo libres de solventes extremadamente tóxicos, si bien existía un gran avance en este punto, no fue hasta después de la Segunda Guerra Mundial que los fabricantes de pinturas tomaran cartas en el asunto y comenzaron a reemplazar pigmentos a base de plomo por pigmentos sintéticos libres de este peligroso material.
Las normas técnicas para la fabricación de las pinturas fueron hechas en la década de 1950, fue hasta este año cuando las pinturas comenzaron a ser más amigables con la salud de los consumidores, estos esfuerzos fueron adelantos que los fabricantes voluntariamente comenzaron a realizar en las emulsiones que creaban en sus fábricas de pintura, pero hasta 1978, cuando la Comisión de Seguridad de Productos del Consumidor, prohibió tajantemente el uso de pigmentos a base de plomo.
En la actualidad podemos encontrar una serie de productos más amigables con el medio ambiente, aunque la mayoría no se encuentra libre al 100% de solventes tóxicos que, al momento de dispersarse en el ambiente, no sólo dañan el aire, sino también los pulmones y la salud de quienes se encuentran en constante contacto con ellos.
Es claro que una fábrica de pinturas y las mismas pinturas han tenido un proceso evolutivo enorme desde que se comenzó a trazar por medio de pigmentos naturales, se han creado diversos tipos de recubrimientos cada vez más estables y resistentes a cualquier condición climática, entre ellos el tipo de pintura que nosotros QD Polvos manejamos orgullosos, pues es una excelente opción para cuidar el medio ambiente y la salud de quienes la utilizan.
Si deseas obtener las mejores pinturas en polvo y revolucionar la manera en la que puedes recubrir cualquier superficie, te invitamos a conocer nuestros productos, todos ellos creados directamente en nuestra fábrica de pinturas, bajo estrictas normas de calidad y seguridad, para garantizar que el producto que consumas, dure mucho más de lo que esperas y brinde belleza y protección a cada espacio que desees pintar.