Una de las mejores alternativas para el recubrimiento de piezas de metal y plástico es la pintura electrostática, conocida también como pintura en polvo. A diferencia de la pintura líquida utilizada tradicionalmente para el recubrimiento de éstos y otros materiales, la pintura en polvo no genera burbujas en la superficie por lo que el acabado que ofrece es mucho más uniforme. Además, su aplicación se hace mediante un proceso en el que no se emite ninguna clase de solvente o gas tóxico que pueda ocasionar daños en el ambiente, razón por la que cada vez es más utilizada. En esta ocasión te hablaremos de las características generales de este tipo de pinturas y de las particularidades que presentan según algunas variaciones en su composición para que cuentes con una guía que te pueda ayudar a elegir la pintura en polvo que se adapte mejor a tus necesidades.
En términos generales, la pintura en polvo es una mezcla homogénea de partículas finas de pigmentos, minerales y resinas que se adhiere a las piezas a recubrir mediante la carga eléctrica de sus componentes, de ello que reciba el nombre de electrostática. Para realizar tal proceso es necesario emplear una máquina de pintura en polvo la cual, al mezclar la pintura con el aire la carga eléctricamente de manera que las partículas sean atraídas a la superficie, por lo regular plástica o metálica, que se encuentra a tierra. Después de que las partículas de la pintura hayan sido atraídas a la superficie se aplica un proceso de calentado en un horno de curado para que se fijen perfectamente en un proceso de revestimiento continuo. En el horno los pigmentos que componen la pintura en polvo se funden por el calor mientras que los minerales y resinas reaccionan entre sí para formar una película uniforme y duradera dando como resultado el acabado de calidad que caracteriza a este tipo de pinturas.
Las características del revestimiento que forma la pintura electrostática están sujetas a la composición de las mismas, por esta razón resulta indispensable conocer las especificaciones del producto antes de emplearlo, de esta manera podemos elegir la que sea más adecuada para una aplicación en particular. Además de presentar pigmentos, minerales y resinas en su composición, las pinturas electrostáticas tienen aditivos, cargas y agentes endurecedores que en conjunto son los responsables del color, flexibilidad, resistencia y tipo de acabado de las pinturas.
Las proporciones en las que se encuentra cada componente en una pintura en polvo varía y se pueden hacer ciertos cambios para crear la ideal para lograr revestimientos de características muy particulares. Para que logres darte una idea del tipo de acabado que obtendrás según la formulación de cada pintura conviene que sepas el papel que desempeña cada uno de sus componentes. El componente base de las pinturas en polvo son las resinas las que se encargan de aportar las propiedades mecánicas y el brillo, de ello que una pintura que ofrezca buen recubrimiento deberá presentar un peso total en resinas entre el 50 % y el 55%. Las resinas por sí mismas no pueden reaccionar y adherirse a las superficies, por lo que necesitan de agentes endurecedores, componentes encargados del proceso de polimerización que da como resulta el recubrimiento.
Por otra parte, los pigmentos son los encargados de darle color a la pintura y los empleados deben ser aquellos que soporten la exposición a altas temperaturas sin sufrir decoloración. Además una pintura en polvo necesita de cargas las cuales le aportan propiedades mecánicas como resistencia a impactos y regulan el brillo de las resinas, y de aditivos, los que aportan el acabado homogéneo que caracteriza a este tipo de pinturas.
Las combinaciones posibles y proporciones entre los componentes que acabamos de mencionar son prácticamente infinitas y como ya mencionamos, se pueden adaptar a las necesidades particulares de cada tipo de aplicación, pero en la actualidad se pueden encontrar fórmulas pre diseñadas que ofrecen recubrimientos con características definidas que las hacen más o menos adecuadas para cierta clase de usos. Los tipos de pinturas en polvo que se encuentran en el mercado son las epóxicas, las de poliéster y las híbridas o epoxi/poliéster y a continuación describiremos brevemente sus características generales.
Esperamos que esta información te haya sido de utilidad para elegir la pintura electrostática que necesitas. Si aún tienes preguntas te invitamos a ponerte en contacto con nosotros, en DQ Powder Coatings con gusto te atenderemos y te asesoraremos en la elección del recubrimiento que se adapte mejor a tus exigencias.