DQ Powder Coatings

Tipos de Powder Coat y acabados que cada uno ofrece

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31/07/2017

Powder coat, pintura electrostática o pintura en polvo es un tipo de recubrimiento que se utiliza para crear acabados uniformes y de alta duración en una gran variedad de sustratos, que pueden ser metales, algunos plásticos y maderas, con lo que se puede evitar las burbujas, o los desperdicios, incluso las emisiones de gases contaminantes, que ocurren con gran frecuencia ante el uso de las pinturas tradicionales líquidas o en aerosol.

El polvo seco, en las industrias es utilizado para el recubrimiento de diferentes piezas, es un compuesto de resinas y pigmentos que se utilizan desde un depósito de suministro que es una pistola de bajo amperaje, que imparte carga de alto voltaje al polvo para pintar una pieza que se encuentra conectada a tierra de forma eléctrica y estática; al rociarse, las partículas de pintura en polvo son atraídas con gran firmeza a la superficie de la pieza a pintar, para que se derrita y funda en una capa lisa al interior de los hornos de curado.

Al no utilizar solventes, la aplicación de las pinturas en polvo es un procedimiento muy respetuoso ante el entorno medioambiental, al evitar la propagación de contaminantes que se evaporan en el aire o que pueden irse por el desagüe; los tipos de formulaciones de Powder coat se determinan por el tipo de material o sustrato donde se aplicará y de las formulaciones, estas son:

  • Epoxi. Son pinturas en polvo que se caracterizan por su alta resistencia a los impactos, además de tener una gran adherencia, alta resistencia ante la oxidación y la corrosión y por su aplicación, que es considerada de alto rendimiento. Se llaman epoxi porque se fabrican con resinas epoxídicas, que aportan funcionalidad a los recubrimientos, sin embargo el brillo y el acabado pueden ser de menor durabilidad, por lo que se recomienda su uso en sustratos que se utilizan al interior, ya que en la intemperie pueden dañarse rápidamente; sin embargo, en las piezas adecuadas se puede obtener acabados altamente resistentes contra la corrosión, muy funcionales y de excelente calidad en brillo y resistencia.
  • Poliéster y poliuretano. Son los recubrimientos ideales para la aplicación en sustratos que se mantienen a la intemperie, ya que tienen alta resistencia ante los rayos ultravioleta y las variaciones en la temperatura; este tipo de pinturas en polvo cuentan con brillo de alta duración y estabilidad en temas de color y de acabado. Sin embargo, cuando se exponen a cargas funcionales muy altas o ante los impactos y dobleces presentan una resistencia menor y pueden reventarse, además de que su resistencia ante los agentes químicos y la corrosión es menor que las pinturas epóxicas. El tipo de resinas de poliéster se endurecen con TGIC o isocianurato de triglicidil, que se utiliza como endurecedor de revestimientos de poliéster que se utilizan en las aplicaciones del metal, especialmente los que tienen aplicaciones en exteriores, especialmente en acabados arquitectónicos, aunque también se usan con frecuencia en zonas donde se trabaja a altas temperaturas.
  • Híbridos. Los híbridos de epoxi y poliéster permiten combinar la durabilidad en el exterior del poliéster con la protección contra la corrosión y resistencia a químicos y disolventes del epoxi, por lo que ofrecen alta resistencia ante los impactos y la corrosión, así como la mayor dureza y resistencia a la intemperie; se fabrican con resinas de poliéster y se endurecen con resinas epoxídicas, por lo que la variedad de sustratos donde se pueden aplicar es mucho mayor.

En resumen, los tipos de pinturas en polvo que se eligen para uso al aire libre, son las mezclas de resina de poliéster y poliuretano, que ofrecen una buena resistencia a los cambios de clima, mientras que para su uso en interiores, se recomienda utilizar una resina epoxi, que resista la corrosión.

Existen muchos beneficios del uso del Powder coat, entre los que encontramos:

  • Una enorme variedad en colores, que brindan acabados brillantes o mates, de acuerdo a las necesidades del sustrato.
  • Una mayor adherencia a los sustratos metálicos, en comparación con los métodos de pintura más tradicionales.
  • Una mayor resistencia ante la corrosión, al utilizar pinturas epoxi o híbridas.

Además de la clasificación de la pintura electrostática con base en los componentes de fabricación, podemos encontrar otra clasificación respecto a los acabados que brindan, los cuales son mate, semi mate, brillante, texturizada, metálica o transparente; la elección del tipo de pintura en polvo dependerá del sustrato, las necesidades de recubrimiento y de la parte estética o decorativa, que hoy en día es de gran importancia en la industria del metal y en la fabricación de todo tipo de plásticos; cabe mencionar que los recubrimientos en polvo se están utilizando con mayor frecuencia en las maderas y cerámicas, gracias al desarrollo de resinas que permiten alcanzar el punto de fusión a una temperatura más baja, la cual es recomendable para ciertos sustratos que no son resistentes a las temperaturas tan elevadas que se utilizan en los hornos de curado.

El acabado estético de la pintura electrostática es muy superior al de las pinturas líquidas, ya que no deja marcas de pincel, ni la aparición de burbujas, el goteo, desperdicio de pintura o imperfecciones en el resultado final. Además el proceso de curado con calor permite obtener resultados más durables que los obtenidos en una superficie pintada tradicionalmente, y resiste mejor a los cambios de clima, el ataque de la corrosión y las posibles manchas de químicos o solventes.

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